La Proforma Presupuestaria 2024 regresa al Ejecutivo con observaciones de la Asamblea

La Asamblea Nacional decidió este jueves regresar la Proforma Presupuestaria 2024 al Ejecutivo, al que dio plazo de diez días para que analice una serie de recomendaciones planteadas por el Legislativo.

Con el voto de reconsideración de 73 de 131 legisladores presentes, la Asamblea decidió devolver el texto presupuestario al Gobierno para que se incluyan las sugerencias surgidas en el debate parlamentario, aunque los legisladores reconocieron que estás no son necesariamente obligatorias para el Gobierno.

La moción para devolver al presidente Daniel Noboa, el proyecto presupuestario fue presentada por el legislador socialcristiano Jorge Álvarez, y sucedió después de que el pleno legislativo no diera paso a su aprobación como pretendía el grupo oficialista.

La asambleísta Nathaly Farinango, del oficialismo, presentó la moción de aprobación de la "Proforma del Presupuesto General del Estado para el período fiscal 2024 y la Programación Presupuestaria Cuatrianual 2024-2027", pero su propuesta sólo obtuvo 32 votos.

Ea decisión se dio al finalizar el plazo que la Asamblea tenía para revisar la proforma presupuestaria elaborada por el Ejecutivo.

Antes de volver a remitir el texto al Parlamento el presidente Noboa tendrá diez días para acoger las observaciones planteadas o mantener el texto de la proforma original que asciende a 35.536 millones de dólares.

Esa cuenta supone un aumento del 13 por ciento respecto al proyecto presupuestario que se presentó en 2023 y cuyo monto ascendió a 31.503 millones de dólares.

En el debate parlamentario de este jueves, varios legisladores se quejaron por la reducción en los presupuestos para la seguridad, la educación y la salud.

También que en la cuenta no se incluyeran los ingresos que supondrá el incremento del Impuesto al Valor Añadido (IVA) del 12 al 15 por ciento que aplicará el Gobierno desde abril próximo.

El debate del pleno también estuvo sazonado con un plantón por parte de algunos sindicatos, sobre todo de la Unión Nacional de Educadores (UNE), que reclamó por los recortes en ese sector.

Andrés Quishpe, presidente de la UNE, se lamentó de que en el proyecto presupuestario se hayan incluido recortes en la educación escolar y universitaria, y que, más bien, se incremente el pago de la deuda externa.

Según Quishpe, en el proyecto presupuestario se destina el 32 por ciento de la cuenta al pago de la deuda pública, sobre todo la exterior.

El líder sindical, indicó que los sindicatos no tendrán otra opción que la protesta, si el Gobierno se obstina en ofrecer privilegios a los sectores pudientes y dar la espalda al pueblo.